ORACIONES
PREPARATORIAS
PARA TODOS LOS DÍAS
Por la señal
Señor mío Jesucristo
Jaculatoria: ¡Oh María,
sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos!
Invocación. Acordaos, oh piadosísima Virgen
María, que jamás se ha oído decir que ninguno
de los que han acudido a vuestra protección, implorado
vuestro socorro y reclamado vuestra asistencia haya sido abandonado
de Vos. Con esta confianza a Vos corremos, oh Virgen de las vírgenes;
y. gimiendo bajo el peso de nuestros pecados, nos postramos a
vuestros pies. Oh Madre del Verbo, no despreciéis nuestras
súplicas, antes bien escuchadlas y acogedlas benignamente.
Amén.
Rezar a continuación
la oración del día que corresponda:
DÍAS
1 | 2
| 3 | 4
| 5 | 6
| 7 | 8
| 9
Terminar cada día
con las siguientes oraciones:
ORACIONES
FINALES
Suplicas.
Oh Madre del amor hermoso, purísima María, por
la manifestación de vuestra santa Medalla, inflamad nuestros
corazones en el amor divino, para que insensibles a las cosas
terrenas, solo suspiren por las celestiales y eternas.
Dios te salve, María,
etc.
Oh refugio de pecadores, poderosísima
María, por la manifestación de vuestra santa Medalla,
tened piedad de nuestras culpas y miserias y alcanzadnos la gracia
de morir antes que pecar.
Dios te salve, María,
etc.
Oh puerta del paraíso,
dulcísima María, por la manifestación de
vuestra santa Medalla, concedednos la perseverancia en el bien
morir santamente y participar de vuestra gloria en los cielos.
Dios te salve, María,
etc.
Ofrecimiento.
Oh Milagrosa Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra,
prosternados a vuestras plantas os encomendamos nuestros corazones,
nuestros afectos, nuestros intereses, la salud de nuestros cuerpos,
la salvación de nuestras almas, la paz de nuestras familias
y el bienestar de nuestro pueblo. Velad por nosotros desde los
cielos, apartadnos de todo peligro, endulzad nuestros pesares,
santificad nuestros trabajos y colmadnos de vuestras gracias
y virtudes, oh siempre Virgen y siempre Madre y siempre buena,
María.
V. Oh María sin pecado concebida
R. Rogad por nosotros que recurrimos
a Vos.
Oración Final
Jesús, Dios nuestro, que quisiste esclarecer a tu bienaventurada
Madre, la Virgen María, Inmaculada ya desde su origen,
con multitud de milagros: Concédenos que por la invocación
constante de su patrocinio consigamos las eternas alegrías
del cielo. Tú que vives y reinas por los siglos de los
siglos. Amén. |